Hace ya doce años que [publiqué]({% post_url 2004-11-19-Serpientes-y-escaleras %}), en los inicios de este blog, esta cita de Hijos de la Medianoche, de Salman Rushdie:
All games have morals; and the game of Snakes and Ladders captures, as no other activity can hope to do, the eternal truth that for every ladder you climb, a snake is waiting just around the corner; and for every snake, a ladder will compensate…but I found, very early in my life, that the game lacked one crucial dimension, that of ambiguity - because, as events are about to show, it is also possible to slither down a ladder and climb to triumph on the venom of a snake.
En estos días, más que nunca, mi vida es un reflejo de esa ambigüedad. Lo que aún no sé es si he caído por una escalera hasta el punto de partida, o si estoy escalando gracias al veneno de una serpiente. O ambas cosas a la vez.
Una de las cosas que nadie te enseña, salvo, quizás, la gran litaratura, el gran cine, es a afrontar ese tipo de giros argumentales, que en una novela o película rechazarías tal vez por exagerados y poco realistas. Pero cualquier cosa puede suceder, en cualquier momento. La cuestión, es si hay una razón, un sentido, o no, si la vida es impredecible, o simplemente demasiado compleja para entenderla.